En el ámbito profesional, Android nos ha dotado de algo muy importante, la movilidad. El hecho de no depender de un lugar de trabajo fijo, supone una gran ventaja para llevar a cabo nuestra tarea. A ésto le sumamos el hecho de estar conectados 24 horas.
Antes, si querías recibir un correo electrónico, tenías que tener encendido el ordenador y si no tenías bien configurado el programa de correo, tenías que ir abriéndolo cada x tiempo. Ahora solo debes configurarlo en tu smartphone y recibirás tu emails a casi al instante de haberlos enviado.
Si trabajáis con plataformas como Gmail, los correos estarán siempre sincronizados y no tendréis los típicos problemas de correos duplicados, los que has borrado y se han vuelto a descargar y similares.
Lo mismo pasa con los documentos ofimáticos. Antes tenías que estar copiando y llevándote los documentos de un lado a otro. Si hacías una modificación, no sabías si estaba actualizado en las otras copias y ahora con servicios como Google Docs o Drive, cualquier modificación que hagas, la llevas en el móvil o tablet, dado que Android es estupendo para el trabajo en la nube.
También llevamos el resto nuestros archivos sincronizados a donde vamos. Ya sean archivos de música, fotos, vídeos, etc.